Los neoliberales son unos megalómanos psicópatas

Algo que he aprendido ahora que trabajo en una gran empresa es que quienes ocupanpuestos de gerencia y dirección son gente megalómana y psicópata.

He de comentar antes de todo que las grandes empresas se estructuran de la siguiente manera: una empresa central compra muchas otras empresas. Todas en conjunto toman el nombre de la empresa central, pero en realidad son empresas distintas: cuando les conviene se publicitan como una única, cuando no les conviene (por ejemplo si una de ellas tiene que quebrar) no las consideran como una única. El sistema podría pensarse similar a el Estado y las Autonomías (pero con poca autonomía cada una).

El punto central a mostrar es que son megalómanos y psicópatas porque sólo les importa el poder de ese “estado dentro de un Estado social”, sin reglas, donde poder exprimir impunemente y dar cabida a sus neurosis.

La cuestión es la siguiente: quieren todo a cambio de nada. Todo el poder como si se tratara de un país y con impunidad. El conocido “bienvenido a la república de tu casa”, pero que sea tu peor pesadilla.

Y cuando digo esto me refiero a:

  • Como ciudadanos de un país, se poseen una serie de derechos y obligaciones. Así mismo, el estado tiene también unas obligaciones para con los ciudadanos (o debería, porque ahora con el PP el estado ignora sus obligaciones).
  • La justicia permite -cuando puede- evitar situaciones injustas (bueno, siempre hay situaciones injustas incluso teniendo un sistema de justicia).
  • Un sistema social ha de dar cobertura a los individuos, en el caso de que no dispongan de comida, alojamiento, trabajo, etc.
  • El trabajo de todos repercute en todos (o debería): impuestos y la buena administración.

Pues las empresas quieren tener todo, concretamente dinero y no dar nada. Cuando abogan por la desregularización de todo, y la pérdida de derechos, etc, lo que ocurre es que una empresa realmente se configura como un miniestado donde los individuos poseen obligaciones pero no derechos y donde la empresa posee mínimas obligaciones con los individuos. Concretamente el caso resultante sería:

  • Como trabajador de una empresa, se poseen una serie de obligaciones y los mínimos derechos. Si pueden ponerte una jornada de 12 o 14 horas esa sería tu jornada. Si pudieran ponerte una de 18 horas te la pondrían, aunque habría algunos que “como valen” sería de menos.
  • La “justicia”, con la desregularización, se puede reducir a: “para los trabajadores rasos hay una serie de normas estricas de vestimenta, comportamiento, trato a sus superiores, etc…; para los gerentes y directivos son otras reglas; si no te gusta, te largas.”. Esta última parte es MUY IMPORTANTE, ya que un estado no puede “deshacerse” de los individuos y está obligado a darles cobertura, mientras que una empresa se desharía (y más si hubiera despido libre) y que el paro lo pague el estado. Es decir: tienen benefinicios sin tener responsabilidades.
  • El sistema de juicio es completamente arbitrario. La empresa en la que trabajo informa de que no hay ningún caso de acoso laboral o por razón de sexo, cuando es completamente mentira: como los casos terminan en pactos o la víctima termina fuera de la empresa no lo cuentan. Si es sistema judicial en nuestro Estado Social es controvertido, en una empresa desregularizada sería puramente dictatorial y a conveniencia.
  • A la empresa sólo le importan los beneficios que serán entregados a los accionistas, mientras que aquellos individuos que no le dan beneficio directo y mezquino son desechados sin importar nada.

En resumen: con la desregularización lo que se pretende es que cada empresa sea un micropaís, con sus normas, leyes, etc, pero además donde sea fácil exprimir a los indivuos gracias a su temor frente a purgas.

No es ficción, no es paranoia. Es la realidad. No es más que la satisfacción de sueños megalómanos y psicóticos de unos cuantos (sobretodo directivos) del deseo de poder, a costa de la necesidad de muchos otros de vivir (y para ello necesitando trabajar).

Actualización:

Acabo de encontrarme con el artículo “Why Valve? Or, what do we need corporations for and how does Valve’s management structure fit into today’s corporate world?” en el que se comenta la idea de que las empresas son “oasis de planificación y orden/control” dentro del capitalismo.

The firm, in this view, operates outside the market; as an island within the market archipelago. Effectively, firms can be seen as oases of planning and command within the vast expanse of the market. In another sense, they are the last remaining vestiges of pre-capitalist organisation within… capitalism.