Recientemente, e inspirado por mi asociada, he estado pensando sobre el concepto de “matrimonio” y la idea que subyace. Justo cuando me he puesto a escribir este post me he encontrado con una genial explicación: http://blogs.periodistadigital.com/aeu.php/2005/06/15/matrimonio_patrimonio_sociomonio. Sea el significado
La palabra castellana matrimonio viene del latín matrimonium, que significa: ‘condición legal de madre, oficio de madre’
o este inventado, pero que refleja el pensamiento que puedan tener algunos:
[…]doña Jiménez , al hilo de la polémica sobre el matrimonio homosexual, pronunció las siguientes palabras: “¿Sabéis lo que significa etimológicamente matrimonio? Matrimonio: cargar con la mujer a cuestas, etimológicamente.[…]
la realidad es que matrimonio tiene una conmotación orientada a la mujer: no hay más que ver en una boda cómo todo gira en torno a “que se casa”.
El término que a mí se me ocurrió fue asociacionismo, donde ambas partes son socios, aunque prefiero llamarlos asociados ya que el término anterior es demasiado común. Al fin y al cabo, quitando el fin de reproducción que impone la religión católica (y supongo que la mayoría) a su matrimonio, y adaptando el “emparejamiento” a los tiempos actuales, el resultado es que la unión de personas se asemeja más a una empresa que a cualquier otra cosa: socios que comparten gastos y en este caso también vivencias. Se asemeja a una empresa por el riesgo que conlleva para muchas personas el casarse: hipotecarse por la vivienda, hipotecarse por hijos, dinero, más dinero, etc.
El concepto de asociados implica que el objetivo no es la reproducción, sino que es definible como por ejemplo desarrollo personal conjunto, felicidad común, autonomía, etc… donde hay gastos compartidos o separación de bienes (lo que se puede considerar ser autonomo), y la existencia de un contrato de por medio, cosa que actualmente ya existe.
El término sociomonio es otra posibilidad a utilizar. Al fin y al cabo, según el artículo, podría significarse:
Sociomonio: Condición legal de socio.
Si bien el artículo enlazado al principio tiene el objetivo de dar la alternativa al matrimonio homosexual (qué miedo dan los artículos de esa web), mis intenciones son bien distintas. El término asociacionismo (sociomonio si se quiere ser más concreto) debería ser el normalizado, mientras que matrimonio relegado a cuestiones de religión (y éste sin validez legal). El término sociomonio ha de incluír el de poligamia (unión de varios hombres y varias mujeres conformando un grafo), como una simple extensión de socios.
El nuevo término debería ser el utilizado por todo el mundo, ya que automáticamente desecharía la idea subliminal que posee la gente en se subconsciente de que casarse es “por la mujer”, evitaría la desnaturalización sufren las mujeres con el “tengo que casarme a toda costa” y “tengo que ser madre y es el objetivo de mi vida”, la finalidad de reproducción en las relaciones de pareja y ayudaría a evitar estereotipos sexuales, con el beneficio de fomentar relaciones más igualitarias con un fin verdaderamente común para ambas (o más) partes: te asociarías porque quieres.